Para acompañar
- Arroz con coco o arroz blanco suelto
- Patacones crujientes
- Pan artesanal o baguette para “limpiar” el plato
- Ensalada fresca de aguacate y tomate
Un bocado de historia y territorio
La cazuela de mariscos es parte del repertorio costero del Caribe colombiano y otras cocinas del Gran Caribe. En ciudades como Cartagena o Barranquilla se prepara a partir de un sofrito criollo y caldo de pescado (fumet), enriquecido con leche de coco o crema, mientras que en otros puertos del Caribe cambian hierbas, picantes y tipos de marisco según la temporada. Esa capacidad de adaptarse al mercado del día y al gusto local la ha convertido en un clásico de celebraciones, almuerzos familiares y menús de comedores marineros.
Consejos para una cazuela perfecta
- No sobrecocines los mariscos: van poco tiempo al final para que queden tiernos.
- Un buen fumet marca la diferencia. Si no tienes, hierve cabezas/espinas de pescado con cebolla, laurel y apio 20 minutos y cuela.
- La leche de coco aporta carácter caribeño; si prefieres un perfil más lácteo, mezcla mitad coco y mitad crema.
- Ajusta la densidad: si la quieres más espesa, deja reducir 2–3 minutos a fuego medio; si está muy densa, suma un chorrito de caldo.
- Termina siempre con ácido (limón) y hierbas frescas para elevar aromas.
¡Y listo! Tienes una cazuela de mariscos digna de costa: profunda en sabor, cremosa y con el mar como protagonista. Perfecta para un almuerzo especial o para celebrar con la familia el fin de semana.
Deja una respuesta